No hay duda de que la Ruta 66 es la más famosa de Estados Unidos, y está en nuestra lista de deseos desde hace muchos años, pero al requerir al menos dos semanas, hemos ido posponiéndola. En esta ocasión disponíamos de 11 días y decidimos hacer esta ruta, la conocida como Great River Road.
Os dejamos aquí nuestro presupuesto completo para esta ruta.
Además de este nombre, es conocida también como la ruta del Mississippi, ya que sigue el curso del río, o Blues Highway, ya que pasa por las ciudades donde nació el Blues.
Aunque originariamente va desde Wyoming (Minnesota) a Nueva Orleans (Louisiana), nosotros nos desviamos un poco al sur, para comenzar desde Chicago, ciudad que teníamos muchísimas ganas de conocer.
El itinerario que realizamos fue: Chicago – Indianápolis – Louisville – Nashville – Memphis – Jackson – Nueva Orleans. Unos 1650 kms. Ahí cogimos un vuelo de vuelta a Chicago, ya que no teníamos tiempo de volver conduciendo. No hay ningún problema en dejar el coche de alquiler en una ciudad diferente al punto de partida, eso sí, tendrás que pagar el suplemento por one-way.
Es una ruta que le recomendaría a quién ya conozca las grandes ciudades de Estados Unidos, ya que pasa por ciudades más pequeñas, y creo que una primera visita a Estados Unidos debe ser para sentirte como en las películas, y disfrutar de las calles de Nueva York o San Francisco, o de la inmensidad del Gran Cañón. Nosotros hemos disfrutado mucho el viaje porque nos ha dado la sensación de conocer una parte más íntima y profunda de Estados Unidos, más allá de las grandes avenidas y la masificación, en ocasiones, del turismo. Pero esto no es más que mi opinión, hay planes para todos los gustos.
¿Qué vimos en nuestra ruta?
Chicago
Chicago sin duda se merecería una entrada aparte, ya que es una de las grandes ciudades de Estados Unidos, y ofrece un montón de atractivos interesantes. No puedes perderte El parque del Milenio, con su famosísima Cloud Gate, la fuente Crown y el moderno pabellón Jay Pritzker. Cerca de allí también tienes el Instituto de Arte de Chicago, con obras como ‘Los nenúfares’ de Monet, o ‘La habitación de Arlés’ de Van Gogh. Si te gustan los miradores, la torre más emblemática es la Torre Willis, a la que pueden subir para observar Chicago desde lo más alto. Tampoco puedes irte sin pasear por State St. y hacerte una foto con el neón del Chicago Theatre. Si el clima acompaña, otro paseo agradable es el del Muelle de la Armada, donde hay atracciones y restaurantes, así como empresas de tours en barco para ver el skyline. Y cerca de allí comienza el Chicago Riverwalk, un paseo de unos 4 kilómetros a orillas del Lago Michigan.
Indianápolis
Se trata de una ciudad modesta, por la que dar un agradable paseo. Cuenta con algunos museos aunque nosotros solo pasamos allí unas horas y no visitamos ninguno. La zona que más nos gustó es la de Mass Avenue, un distrito artísticos de la ciudad, que tiene un ambiente más bohemio y artístico y cuenta con restaurantes y tiendas independientes. Antes de irnos nos acercamos a visitar el Circuito de velocidad de Indianápolis. Hacen visitas guiadas, dónde puede verse el circuito al completo y algunos coches, pero nosotros solo entramos al recinto exterior.
Louisville
Louisville es una ciudad pequeña, conocida por ser la mayor productora de Bourbon, y por las carreras de caballo. En nuestro caso, ni nos gusta el bourbon, ni apoyamos ninguna actividad que tenga que ver con animales, así que solo la usamos como base para pasar la noche, y dimos un paseo antes de seguir nuestro camino. Sin embargo hay tours muy populares que muestran la elaboración del bourbon, cuentan su historia, e incluyen cata. Si pasas allí la noche, puedes visitar Fouth Street Live, una zona de bares con música en directo.
Nashville
Nashville es la capital del estado de Tennessee, y meca de la música country. Como solo íbamos a pasar un día en la ciudad, nos centramos en la zona de Broadway Avenue, la calle donde se encuentran todos los Honkey-tonks y hay música en directo a cualquier hora. Te recomendamos que te dediques a esta zona cuando empiece a anochecer, ya que es más bonita verla con los neones encendidos y hay más ambiente en los bares. Durante el día puedes visitar el museo de Johnny Cash, dar un paseo por la rivera del río Cumberland, o visitar el Centennial Park, donde hay una réplica a tamaño real del Partenón de Atenas.
Memphis
Memphis fue una de las grandes sorpresas de este viaje, ya que pensábamos que sería una ciudad sin muchos atractivos y nos sorprendió con mucha historia. No puedes irte sin visitar el Motel Lorraine, ahora Museo Nacional de los derechos civiles, ya que fue aquí fue donde asesinaron al Dr. Martin Luther King en 1968. Puedes visitar el museo y simplemente pasear por la zona e informarte con los carteles y videos que están expuestos para que cualquiera pueda leerlos. También te recomendamos visitar el hall del hotel Peabody, donde quizás te encuentres con sus famosos patos dándose un baño (tienes la historia completa en nuestro Instagram, @conequipajedemano). Un poco alejado de esta zona encontrarás Graceland, la mansión donde vivió Elvis Presley. Existen diferentes tours para visitarla, aunque debes reservar con antelación. También puedes visitar Sun Records, donde grabó su primer álbum. Por último, cuando caiga la noche, pásate a visitar Beale Street, el equivalente a Broadway Avenue en Nashville. Nosotros fuimos fuera de temporada y nos resultó un poco deprimente, aunque seguro que en verano tiene mucho más ambiente.
Nueva Orleans
El principal atractivo de Nueva Orleans es el Barrio Francés o French Quarter. A nosotros nos encantó visitarlo por el día, pasear por sus calles, admirar la arquitectura de la zona… Pero en cuanto cae la noche se convierte en una zona de fiesta, despedidas de soltero y el ambiente es más inseguro (aunque nosotros en este aspecto no tuvimos ningún problema). Te recomendamos visitarlo durante el día, acercaros hasta Jackson Square, la plaza principal del barrio, donde se encuentra la catedral de San Luis (parece el castillo de Disney), visitar sus tiendas y galerías de arte, disfrutar del ambiente en sus calles…
Uno de los planes más populares es tomar unos beignets (una especie de buñuelo con azúcar glass) en el Café du monde, pero prepárate para las largas colas. Si vas a pasar por el aeropuerto de Nueva Orleans, allí hay otra sucursal de este cafetería (no con tanto encanto), y allí puedes probarlos sin tener que esperar tanto. ESTÁN INCREIBLES. Otro plan popular en Nueva Orleans es tomar un barco de vapor y navegar por el Mississippi.
No puedes irte sin disfrutar de la gastronomía local, una de las más populares de Estados Unidos. La comida criolla y el soul food es uno de los grandes atractivos de la ciudad. Nosotros comimos en un restaurante llamado Gumbo Shop y fue una experiencia de diez.
Si dispones de más tiempo, la zona de Magazine Street tiene muchas tiendas independientes, y es muy agradable pasear por aquí.
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